miércoles, 29 de septiembre de 2010

El deseo

Invito al mundo a aportar sus opiniones sobre qué es EL DESEO.
No hay formato ni reglas, sólo ese tema.

Pueden hacerlo a través de los comentarios, o solicitando permiso para la publicación de posts.
(¿cómo? ¿a quién? a cualquiera de los contribuyentes de este blog, a mí. No sé cómo... por mail quizás).

viernes, 17 de septiembre de 2010

Desesperacionismo

la dulce espera

que quien espera desespera

Esperar es como el deseo, una condición pasiva --por más que se aproveche el tiempo haciendo otra cosa. Aprovechar el tiempo es una falacia occidental. No existe la pérdida de tiempo. Esperar quieto es pensar el tiempo. Pensamos en la producción, de ahí la idea de pérdida de tiempo.
- ¿Qué estás haciendo?
- Nada.
Esa respuesta debería ser más común. ¿Es común? Digo, ni siquiera viendo televisión. Nada. Contemplación. Ojalá mente en blanco. Ojalá nos invadan los orientales. Que saber deje de ser cantidad (enciclopedismo). Que esperar sea el esperar del pescador.

Ojalá vivir esperando. Anulación de la producción (Revolución Industrial Reversa)

jueves, 16 de septiembre de 2010

La espera y el mensaje

¿Qué hago? ¿Lo llamo? Aún no le contesté el mensaje...A veces creo que las cosas a veces se dan o no se dan por algo ¿Qué me aconsejás?

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Yo en su lugar

Muchas veces quise ponerme en sus zapatos. En realidad más que nada en esas botas de cuero marrón, las que tienen tacos. Tienen pinta de lejano oeste, de polvo añejo, de historia llena de secretos.
La única vez que lo intenté sólo pude meter el pie izquierdo, y lo saqué enseguida porque sentí algo raro adentro. Resultó ser una cucaracha. Cómo hacer entonces para ponerme en sus zapatos. Se me fueron las ganas. Además, eso de la igualdad no es cierto. La verdad es que somos todos distintos.

martes, 14 de septiembre de 2010

La espera...

Eran las 20.45...faltaban 15 minutos. Me miré al espejo. No estaba nada mal.Miré el reloj: 20.46; faltaba menos, me había dicho a las 21.00. Fui hacia la mesa donde estaba la cartera y agregué un paquete de pañuelos de papel y otro de chicles. Volví al espejo y me acomodé el pelo. Prendí la tele, pero dejé el volumen bajo para escuchar el timbre. 20.50. Fui hacia la ventana para ver si había espacio en la calle como para estacionar el auto. Oí gritos, venían del 2do piso, nada fuera de lo común. Apagué la tele, miré el celular. 20.55. Tenía ganas de fumar, pero yo no fumo. Volví al espejo "¿Estoy bien? Demasiado maquillaje para una primera cita...bueno, no tanto". Me puse un poco de brillo sobre los labios. 21.00. La hora justa. Me senté sobre la cama y tomé el espejo de mano...riiiing...el teléfono de casa me hizo sobresaltar. Mi hermana. Muy inoportuna su llamada. Traté de cortar de la manera más discreta y cordial que pude. 21.05 y no llega. Escuché la frenada de un auto y me acerqué a la ventana pero nada ¿Le habría pasado algo?, ¿Sería impuntual? Yo no lo conocía tanto, no sabía si mentía u ocultaba algo. Tomé el celular para llamarlo, ya que no había mensajes, pero me detuve ¿Habría yo entendido mal? ¿Sería que nos encontrábamos directamente en el restaurant? Prendí la tele. Me interesé por un programa de cocina y subí el volúmen. Los gritos otra vez y esta mujer no paraba de gritar. Subí más el volúmen de la tele para tapar los gritos. Me llamó mi hermana al celular para contarme su pena otra vez. Llantos, gritos, y una pastafrola en el medio de la pantalla. Traté de manejar la situación. Por fin mi hermana cortó el teléfono. Eran las 22.00. De él, ni una noticia. Me fui a dormir, luego de haber atacado un cuarto de helado que había quedado en el freezer.A la mañana siguiente, un mensaje:
- T pase a busc pero no atendiste. Toy llamando al cel pero ocupado. Dnd tas? - 21.10-

lunes, 13 de septiembre de 2010

Los gritos y la empatía

Hoy en el trabajo dieron un curso de comunicación. En él comunicaban modos de comunicar mejor para lograr la optimización comunicacional. Dijeron tantas veces la palabra comunicación que parece que se me pegó y mis dedos no dejan de tipearla. La verdad es que al principio estuve entusiasmada, pero luego me aburrí un poco. Para cuando estaba a punto de generar mi vigésimo bostezo nombraron una palabra que rara vez escuché: empatía. Dijeron que su significado era más o menos “ponerse en los zapatos del otro”. Yo empecé a delirar pensando en mi mamá, quien siempre me impidió intercambiar los zapatos con mis amigas, cuando era adolescente, por el tema ése de los hongos que se contagian…bueno, luego volví a la clase en cuerpo y mente. Y ahí entendí un poco más. Tiene que ver con tratar de entender a los demás, como si uno estuviera en su lugar. Pensé en la nueva del 2do ¿Por qué grita? Pensé en invitarla a tomar un café para charlar. Justo terminó el curso y me quedé con ganas de saber más.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Los gritos


Anoche me pasó otra vez. No podía parar de gritar. Qué pensarán los del 1°. Qué pensarán los de 3°. No puedo remediarlo.

Creo que me pasa los días de lluvia. Bah, las noches de lluvia. Quizás deba tomarme una pastilla antes de acostarme. Ahora que lo pienso en verano no me pasaba -tal vez sea porque no uso camisón. No sé por qué lo relaciono con el camisón. Aunque en verano también llueve. Siempre llueve. Hay algunos lugares donde no llueve nunca, esos lugares áridos que están más al norte. No debe ser por la lluvia.

Nunca me puse a pensar en la luna, hasta anoche. Dicen que las fases de la luna nos afectan, sobre todo a las mujeres. Voy a empezar a registrarlas. Me parece haber visto un calendario con las fases. Podría comprar uno y ver si hay una relación. En una de esas me pasa que tengo pesadillas las noches de luna nueva, por ejemplo. Qué pensarán los vecinos.

La mayoría de las veces me despierto en medio de los gritos, entonces me doy cuenta de lo que estoy haciendo. También me doy cuenta de cómo son los gritos. Deben pensar que estoy loca. O que soy una histérica. Es que son gritos como de histérica. Raúl siempre me decía que soy una histérica. Espero no cruzarme con nadie cuando baje por el ascensor. Me convendría ir por las escaleras, total no es mucho. Hasta la puerta hay varios metros. Una vez en la calle, ya está. En la calle ya no me ve nadie y estoy a salvo. Espero no cruzarme con nadie.

sábado, 11 de septiembre de 2010

Los gritos

Anoche no pude dormir. Oía a una mujer gritar fuerte, histérica. Gritaba como para sí misma, pero a la vez, como despotricando contra alguien, un hombre. Primero traté de ignorar la voz y dormir. Cuando me dì cuenta de que no lo conseguiría traté de identificar quién podía ser la persona. La del B no era, tiene la voz más gruesa y no suele gritar. La del C tampoco, pues estaba de vacaciones. La del A soy yo. Debìa ser del piso de abajo. Tal vez estaba en la escalera. ¿Sería la nueva del 2do? Es muy probable, yo le he visto cara de histérica. Claro, seguro era la del 2do, la nueva.
Hoy me la crucé a la mañana. Me saludó por primera vez, tal vez se había arrepentido de lo que hizo. Obviamente le di vuelta la cara.
¿Habrá sido la del 2do?
¡Quién sabe!

viernes, 10 de septiembre de 2010

Una torre

lo que quedó es lo de hoy
que lo veo que le falta que no es todo

una parte

o resabio

dolor de cabeza o sueño o mal aliento
la lengua y los dientes violetas
mucha sed

los fideos en un masacote
las colillas el humo pegado en las paredes
el piso pegoteado

las sábanas salidas


hoy no es simplemente otro día
no es un día nuevo

hoy es un día que viene precisamente
después de ayer

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Los restos de anoche...

Anoche comí pastas...bueno, fideos. Fideos sin salsa, sin queso, sin crema, sin manteca. Con un poco de aceite nomás. No tenía ganas de cocinar y casi ni de comer, lo cual es lógico ya que sólo tenía en mi plato fideos...sin nada. Estaba sola porque él iba a la facultad y luego se encontraba con un amigo. Sola y feliz, porque podía prender la tele, sentarme en la cama y comer lo que quisiera...aunque nada más había...bueno, en fin. En la tele daban un programa de cocina en el que prepararon un guiso, picante y calórico, bien de invierno. Busqué una "bic" y un papel para anotar la receta y hacerla alguna vez. En el tiempo que tardé en tomar nota se me enfrío la comida, así que dejé de comer y guardé lo que quedó en un "tupper".
¡Hoy tengo ganas de comer guiso!, pero no tengo intención de cocinar. Tal vez los restos de anoche...pero sólo son fideos sin salsa, sin manteca...bueno, bato unos huevos y hago una tortilla. No hay queso. En fin.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Los restos de anoche

Propongo el primer tema, haciendo referencia directa al título de este proyecto:
Los restos de anoche.
Posibles temas transversales:
- Torre de Babel
- Propina del 10%
- El fruto cae siempre cerca del árbol