miércoles, 24 de noviembre de 2010

Fiestas de fin de año

Creo que las fiestas de fin de año son como las Torres de Chenoa: un menjunje de cosas, personas y sentimientos. Comemos de más, reímos, lloramos, hacemos balances que a veces son innecesarios. Hablamos de gente que no está, decimos"uff, ¡con este calor cocinar!" y "Uff, ¡para qué comí tanto!". Ingerimos nueces y turrones como si estuviéramos en el hemisferio opuesto. Hacemos muchas cosas raras, pero siempre esperamos las fiestas. Siempre un nuevo año nos trae esperanza, como si traspasáramos una puerta transparente y volviéramos a Cero.

martes, 23 de noviembre de 2010

Te cuento

Te cuento.
la empatía es un puente
como un arco
que va
desde dos ojos a otros dos ojos
se forma de repente
y es
muy fuerte
no, no sé qué material
eléctrico capaz,
pero escuchame, guarda
con que se extienda mucho
sí,
no, no sé qué pasa
vos cualquier cosa
bajá los ojos.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Los números

Mis manías se centran en los números... cuento 4 baldosas iguales y las piso en la vereda de la cuadra siguiente a la mía. Es una vereda particular, donde hay cuatro baldosas que no están rotas y son como de otro color. Tal vez las colocaron después de las demás. No lo sé.
Cuento hasta diez antes de sentarme en un asiento del colectivo que se acaba de vaciar... y cuento en forma progresiva cuando estoy en una clase de gimnasia, mientras la profesora lo hace de manera regresiva ¿Eso es una manía, un juego, o ganas de contradecir al otro?

La manía de vivir en sociedad

Tengo una manía, una solita. Voy a confesarlo:
Al levantarme de la cama no puedo pisar el piso -apoyo los pies directamente sobre las pantuflas u ojotas. No encuentro razones. En realidad he llegado a creer que lo hacía para no ensuciarme los pies, pero al poco tiempo descarté esta suposición, al darme cuenta que andaba todo el día descalzo. A veces ando descalzo por la casa, por el jardín, hasta por las calles; de esta conducta mía deduzco que no soy tan pulcro, que no puede molestarme dar un paso descalzo al levantarme de la cama.

¿Es eso una manía? ¿Algo sin sentido, un capricho repetitivo?
¿La cultura es un compendio de manías?

Repetir una frase 70 veces por día, durante 70 días; para entonces se habrá incorporado a nuestro organismo ese nuevo concepto o modelo mental o paradigma.